Llevo tiempo detrás de esta receta. He hecho varias veces patatas bravas pero nunca conseguía ese sabor característico de esta bodega de Paco el macho, sitio de reunión de cuando era una adolescente en Cartagena. Creo que esta es de las que más me recuerdan a su sabor picante que acompáñabamos con vino dulce en porrón. Me he quedado sin batería en la cámara y la última foto es justo antes de emplatar. Aunque estén en la sartén creo que se puede ver como quedan, quizás me he pasado de tiempo al hervirlas; la próxima vez las dejaré un poco más duras antes de freír.
Patatas bravas Paco el macho
Ingredientes:
6 patatas medianas
6-7 guindillas
sal
aceite
6-7 ajos
1 cucharada de postre de pimentón dulce
1 cucharada de café de pimentón picante
1/2 vaso de agua de hervir las patatas
Ponemos a hervir las patatas lavadas con agua, sal y las guindillas. Dejar hasta que estén cocidas pero no muy blandas ya que después hay que freírlas.
Mezclamos el pimentón y reservamos. Sacamos las patatas , las pelamos y ponemos a calentar el aceite (yo he puesto un poco más de medio vaso ). Pelamos los ajos y machacamos junto con las guindillas.
Cuando tengamos las patatas con un poco de color dorado, retiramos parte del aceite y dejamos un fondo donde añadiremos el majado de ajos y guindilla y dejamos a fuego lento para que no se quemen y vamos removiendo con cuidado hasta que cojan color los ajos.
Seguidamente añadimos el pimentón sin dejar de remover para que no se queme y añadimos un poco de agua de las patatas. Y listo para servir.